A lo largo de las entradas anteriormente realizadas, y
durante la evolución del semestre hemos ido viendo la evolución por la que han
pasado las tecnologías de la información y la comunicación, y como se han
llegado a convertir en algo indispensable en la sociedad en la que vivimos. A mediados
de los años 80 el Ministerio de educación, para intentar buscar una solución en
referencia a la cuestión de las TIC, desarrolló el proyecto ATENEA que se
encargaba de velar por la calidad de los aprendizajes escolares a partir de la
introducción de las TIC en el aula. A partir de ahí, se han creado diferentes
planes de inclusión de las TIC en el aula, y aun así ninguno de ellos ha
llegado al fin deseado, ninguno ha conseguido la correcta integración de éstas
en el aula.
Una pregunta invade mi mente: ¿Cómo puede ser que el uso
de las TIC hoy en día no esté normalizado? Un estudio de Trujillo empieza a
responderme esta pregunta, en el cuál analiza la ley educativa actual, la
LOMCE. Esta ley concibe a las TIC como una simple herramienta complementaria, e
incluso como una asignatura más sin importancia. Esto me lleva a pensar que si
desde el pilar básico, como es la ley educativa actual, no se da apoyo al uso
de las TIC como herramienta básica en la educación, todo lo demás
automáticamente también fallará. Por ello, debería remodelarse en primer lugar
la ley, para que posteriormente pueda cambiar la situación en la que se
encuentran las TIC.
Otro plan TIC que me parece interesante mencionar es el
proyecto Xarxipèlag (2000), que tenía como objetivo que todos los centros de
las Islas Baleares contaran con equipamientos suficientes, con conexión a
Internet, facilitar la gestión académica administrativa y proporcionar
formación y recursos didácticos a los profesores. Gran parte de estas medidas
quedaron estancadas y cayeron en el olvido, por lo que se puede ver que este
plan no se desarrolló como estaba pensado.
Area, en su lectura “Veinte
años de políticas educativas”, nos explica que cada comunidad autónoma desarrolla
sus propios planes de manera aislada y no se sigue un plan general a nivel
estatal que coordine la inclusión de las TIC en el ámbito de la enseñanza. Bajo
mi punto de vista, si se realizase un plan de integración de las TIC a nivel
estatal y se cumpliese, siempre que fuese adecuado, podría caber la posibilidad
que las TIC ocuparan el papel que se merecen hoy en día.
Bajo mi punto de vista, para que haya una buena
integración de las TIC se debe desarrollar el conocimiento TPACK, es decir, un
docente debe tener tres tipos de conocimientos que se han de complementar entre
ellos. Éstos son: conocimiento disciplinar, conocimiento tecnológico y
conocimiento pedagógico.
Por todo lo mencionado a lo largo de esta entrada,
considero que las medidas tomadas para el proceso de inclusión de las TIC en el
ámbito educativo no son, en ningún caso suficientes ni adecuadas. Por ello, para que la situación mejore se
deben tomar las medidas necesarias, hasta llegar al punto de que las TIC formen
parte de la vida diaria del aula como herramienta de trabajo básica. A continuación os dejo un vídeo de un autor mencionado a lo largo de la reflexión, que nos habla de las competencias digitales educativas.